Thursday, January 30, 2014

Inundaciones dañan 80 % de Cliza

En la zona de Huañakawa, municipio de Cliza, ayer el panorama era desolador debido a que las aguas del río Retamas se desbordaron por tercera vez consecutiva en enero. Todas las viviendas en la zona fueron alcanzadas por las aguas que superaron el metro de altura y ocasionaron el desplome de las paredes de adobe.

Camiones, camionetas y taxis trasladaban ayer colchones, roperos, catres y refrigeradores, mientras los habitantes continuaban sacando de sus casas otros enseres domésticos, por temor a que las viviendas se desplomen completamente.

Muchos niños tenían la ropa mojada y algunos jugaban en medio de las aguas turbias; otros, en cambio, lloraban en la calle por temor a que su vivienda se desplome.

Es el caso de Natalia, de 10 años, que llora de miedo e incertidumbre después de que uno de los muros de su casa se cayó frente de ella.

“Párate en la calle, ahí en el medio”, le grita su madre, mientras ella sólo atina a llorar y agarra de la mano a sus dos hermanitas menores que no saben lo que pasa.

“Mis zapatos se los llevó el agua”, contó Félix Cotrina, de 10 años, quien lleva puesto un corto, una polera y tiene los pies descalzos, porque su casa se destruyó y ahora está alojado en la escuela Libertad con su mamá y su tres hermanos. Su padre y su hermano mayor se quedaron en lo que queda de su vivienda para cuidar su pertenencias.

“¡Ayuden, ayuden esta pared se va a caer, hay que sacar las cosas al patio!”, dicen los vecinos de Corina Valdivia que está embarazada de unos 8 meses y que saca sus enseres domésticos con ayuda de vecinos y efectivos del SAR-FAB.

El panorama es similar en todo el municipio de Cliza, el más afectado por el desborde de los ríos Cliza y Toco tras la lluvia la madrugada de ayer y que afectó además a 53 comunidades.

“No me miren nomás, ayúdenme a rescatar mis cosas”, fueron las palabras de Eufonía Vallejos, una mujer de unos 45 años de edad, que tenía la mirada perdida, la ropa mojada, además de la cara y el cabello cubierto de barro. Cuenta que trabajó toda la noche para rescatar sus pertenencias porque los cimientos y las paredes de su casa empezaron a ceder por las constantes llegadas del agua. “Qué voy hacer, mi casa se va a caer las paredes están rajadas. Necesitamos ayuda por favor, que nos traigan bombas, tubos para sacar el agua”. También comentó que dormiría en el patio de su casa porque hay riesgo de que se derrumbe en cualquier momento.

Daños

El alcalde de Cliza, Freddy Vargas, afirmó que los daños son incalculables debido a que las aguas afectaron el 80 por ciento del municipio y a 53 comunidades. Los daños agrícolas y pecuarios son cuantiosos. Las comunidades más afectadas son Huañacawa, Tacoloma, Ucureña, Flores Rancho, Wasacalle y Mosoj Rancho. “El agua se ha llevado gallinas, palomas y chanchos, los cultivos de maíz están anegados. No quiero ni recordar como las casas se desplomaban en la madrugada haciendo llorar a nuestra gente", dijo Vargas.

Afirmó que la construcción de una presa en la unión de los ríos Toco y Cliza sería una alternativa para evitar desbordes en el futuro.

Desastres en Colcapirhua

Las zonas de Sumunpaya y Sumunpaya Cullco del municipio de Colcapirhua también fueron afectadas ayer por el desborde del río Supaycalle, informó el Oficial Mayor Técnico de ese municipio, Marco Salguero.

Aseguró que unas 40 viviendas fueron inundadas y se evacuaron a 20 familias a la unidad educativa Simón Bolívar y a una cancha múltiple de Sumunpaya. Salguero afirmó que se realizan trabajos en la zona con maquinaria del municipio para reforzar las partes del río que presentaron desbordes.

El pasado fin de semana y el martes el municipio también sufrió el desborde del río Papamayu que afectó a unas 54 familias en la zona de Esquilan Grande. Ahora el municipio cuantifica que tienen unas 320 hectáreas de cultivos de maíz y alfalfa dañados y más de 60 familias evacuadas.

Capinota también presentó afectación por la lluvias en el Valle Alto y en la zona andina del departamento se reportaron deslizamientos en los municipios de Tacopaya, Cocapata y Bolívar, informó el responsable de la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) de la Gobernación, Óscar Soriano.

No comments:

Post a Comment