San Buenaventura levanta los datos de los daños ocasionados por inundaciones, tomando en cuenta que son varias las comisiones que realizan ese trabajo, se estima que hasta hoy se tendrá un panorama más exacto de las necesidades, según informó la alcaldesa Anahí Hirose.
“Lo que en este momento nos preocupa es el desabastecimiento de alimentos, porque ni lo que la Gobernación nos ha mandado nos está alcanzando, nos preocupa la hambruna que se está viviendo”, relató a EL DIARIO la alcaldesa Hirose a tiempo de hace conocer que su municipio se encuentra en una etapa evaluativa.
Divididas en diferentes comisiones, para hacer reconocimiento por todas las poblaciones, autoridades municipales de San Buenaventura, desde el día de ayer, iniciaron el recuento de las pérdidas económicas, producto de las inundaciones que afectaron todo su territorio.
Según Hirose, San Buenaventura aún está viviendo una de sus peores épocas climáticas, pues los niveles del río Beni sobrepasaron los 9 metros de su caudal. Sin embargo, hasta el día de ayer la turbulencia bajó en intensidad debido a que durante el fin de semana no se registraron lluvias en las zonas altas del norte paceño.
El nivel decreciente de las aguas además ha permitido que las brigadas municipales puedan desplazarse río arriba y luego de más de un mes de aislamiento, hacer contacto con varias comunidades que se encontraban cercadas por las aguas, producto de los desbordes de otros ríos.
Pero la tarea no es sencilla, pues la intención de las autoridades, a pesar del desabastecimiento de alimentos, es la de trasladar a las familias a refugios en San Buenaventura para prevenir, entre otras cosas, las enfermedades tipo diarreicas por el consumo del agua turbia o las picaduras de mosquitos transmisores de dengue y fiebre amarilla.
“Entre familias que han perdido sus viviendas, chacos, producción agrícola, su ganado, pasan de las 2.000 (…) del tema de los cultivos aún no tenemos datos oficiales porque nos llegan reportes desde diferentes puntos, las familias nos dan otros y hasta el momento con los lugares incomunicados no se sabe. Esperamos que hasta mañana (en la tarde) tengamos ya un recuento más o menos oficial”, declaró Hirose.
NECESIDADES
Al momento desde las poblaciones como Tumupasa, Carmen del Emero o Villa Fátima, los reportes que se tienen dan cuenta de un buen número de familias que se niegan a ser evacuadas, pues en el lugar tienen animales de granja a los cuales deben alimentar y proteger de otros que también se ven hambrientos pues la inundación afectó el hábitat de todas las especies, incluyendo las depredadoras.
Sin embargo, estas familias y las que se encuentran refugiadas en San Buenaventura tienen como necesidad esencial el agua potable, alimentos perecederos y medicamentos para la gran cantidad de infecciones cutáneas producto de la humedad y el lodo.
Por último, Hirose explica que toda esta ayuda es de carácter preventivo y paliativo, pues las verdaderas medidas para solucionar el caos en el que se vive se elaborarán luego de hacer esta evaluación y se tenga contabilizada todas las pérdidas tanto de infraestructura como humana.
No comments:
Post a Comment